Para Sentir Solo Hay
Que Querer
Que es lo primero que se nos viene a la cabeza cuando
decimos “familia”, tal vez sea el significado de papá, mamá e hijos, desde otro
aspecto, significa amor, apoyo, valores, risas, e infinidad de cosas que una
familia brinda.
Los Boxtrolls es una fábula que transcurre en
Cheesebridge, una elegante ciudad posvictoriana cuyos habitantes están
obsesionados con el dinero, la clase y el más delicioso queso apestoso. Bajo
las alcantarillas de la ciudad viven los Boxtrolls, unos repugnantes
monstruos que todas las noches salen de sus guaridas para robar los bienes más
preciados de los ciudadanos de Cheesebridge; sus hijos y sus quesos. Al menos
eso es lo que cree la gente, pero en realidad estas criaturas son seres
adorables y un tanto estrafalarios que han criado a un pequeño huérfano humano.
Egg él huérfano que fue criado por estos monstruos
creció con unos valores, un carisma y un amor por su familia muy grande, a
pesar de esto él no comprendía muchas cosas, como la razón del porque ellos se
escondían de los humanos, porque ser diferentes los llevaba a refugiarse y
cuidarse entre ellos para no ser lastimados.
¿Acaso ser diferente es sinónimo de ser malo, tener
pensamientos, gustos, actitudes diferentes a las estipuladas por esta sociedad
en la que vivimos está mal? Y que solo
por esto no podemos hacer parte de un círculo social y ser tan normales como
todos los seres que existen en la tierra.
Pensemos en como hubiera sido la vida de Egg si los
boxtrolls no lo hubieran acogido en su hogar, tal vez no tendría los valores
que resaltan en la película, ahora analicemos todos esos niños que se encuentran
sin familia y que perdieron la oportunidad de ser amados por unos padres por el
solo hecho de tener inclinaciones sexuales diferentes a las “normales”.
No es ridículo que hasta para ser amado por una
familia, su núcleo deba ser papá y mamá, ¿acaso dos papás no pueden amar igual,
dos mamás no se preocuparan por sus hijos de la misma manera? para expresar y
brindar los más grandes sentimientos no hay que seguir ninguna regla y mucho
menos un conducto regular, simplemente se hace sin importar si soy mujer,
hombre, niño, niña, si me gusta el blanco o el negro, o si soy gay o lesbiana,
para sentir solo hay que querer.
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